El real brasileño consagró ayer su mayor avance logrado a lo largo de un año desde que fue creado, en 1993. La suba de la moneda respecto del dólar, de un 34% en estos doce meses (y de 3,1% en la toda la década), fue la segunda más grande del planeta al ubicarse sólo por debajo de la que mostró la rupia de Seychelles (+48%). Y fue un reflejo de la bonanza de la que pudo gozar, este año, la mayor economía de América Latina: una de las primeras del mundo en salir de la recesión y revertir el flujo de capitales. El Bovespa acompañó ese exitismo, con un crecimiento del 144% en dólares, durante 2009, que fue el tercero más elevado de su historia; y del 81%, en reales, que fue el mayor de los últimos seis años.

“Brasil se consolidó durante este año como un lugar relativamente seguro para invertir. Tuvo un muy buen año y era lógico que percibiera una mayor inversión en renta fija y las acciones , opinó en una entrevista con la agencia Bloomberg el jefe de operaciones de Banco Prosper, Jorge Knauer.

Según un informe de la consultora Economática, el impulso del Bovespa en dólares respondió, por una parte, a la fuerte apreciación que mostró la moneda brasileña frente a la divisa estadounidense, que ayer cerró el año cotizando a 1,7430 reales para la venta (igual que el día anterior); y, por otra parte, al efecto “recuperación que sintió esa plaza después de la peor crisis global en 70 años (la del 2008).

Así, la divisa norteamericana en ese país acumuló desde enero la devaluación más acentuada de Latinoamérica. El real cerró estable, ayer, a 1,743 unidades por dólar, luego de una sesión de gran volatilidad en la que había llegado a apreciarse 0,17%, y a depreciarse 0,34%. A nivel global, el dólar mostró ayer una tendencia hacia la apreciación, de 0,13% sobre el cierre del día, ante una canasta de monedas de referencia en el mundo.

Durante el comienzo de la rueda, el Banco Central brasileño decidió cancelar una oferta inicial para comprar dólares en el mercado de cambios a la vista. Pero, poco después, anunció una nueva subasta. “El mercado entró vendiendo al Banco Central (en la primera subasta), pero la entidad oficial vio que los precios no estaban en línea con la media del día y decidió anunciar otra subasta , comentó Reginaldo Galhardo, gerente de la casa de cambio Treviso.

Brasil se destacó este año, a nivel global, como una de la grandes economías que resistió el embate de Lehman Brothers, sin notar una contracción en su producto. Su PBI se mantuvo inmutable ante las turbulencias, pero dejó a la vez buenas variables macro: según datos de la consultora Abeceb.com, el Banco Central de ese país acumuló a lo largo del año u$s 34.700 millones en reservas internacionales; y la economía local percibió un incremento en la inversión extranjera de u$s 25.500 millones, un superávit comercial de u$s 24.200 millones y una entrada de capitales de u$s 18.300 millones.

La disparada del petróleo, que empezó el año cercano a los u$s 40 y terminó rozando ayer los u$s 80, fue clave como impulso para las acciones de Petrobrás, que ganaron un 94,7% en estos doce meses, y que tienen la mayor ponderación en el Bovespa. Por la buena salud de los commodities, la acción brasileña Vale Río Doce logró una suba de 137,3%; y la solvencia del sistema financiero dejó al gigante Itaú Unibanco con un crecimiento del 95,2%. “Está claro que el crudo fue de los mejores commodities: con una suba de 81%, no fue superado ni siquiera por el oro (25%) ni por la plata (54%) , explicó un analista del mercado local. En lo mejor del año se ubicó, en cambio, el cobre, con un avance del 130%.