

Todavía conmovidos por la noticia de la quiebra de Lehman Brothers, los inversores comenzaron a aguardar desde hoy el anuncio de un plan de supervivencia de la aseguradora estadounidense American International Group (AIG), para tratar de evitar que se convierta en el último gigante financiero en hundirse por la crisis crediticia en Estados Unidos.
La Reserva Federal (Fed) apoyaba esfuerzos de los bancos Goldman Sachs y JPMorgan para conseguir fondos para AIG, cuyas acciones han perdido un 90 por ciento este año.
“La Fed está alentando a las partes a que solucionen esto y está apoyando los esfuerzos de estas empresas para encontrar financiamiento para AIG , dijo un funcionario de la Reserva.
Las acciones de AIG -una de las mayores aseguradoras del mundo por valuación de mercado- cayeron un 60,79 por ciento, a 4,76 dólares, en el mercado estadounidense.
El peor remezón financiero desde la Gran Depresión, obligó a la Fed a sacar una línea de crédito de salvataje para la complicada industria financiera.
El banco central estadounidense dijo que por primera vez aceptaría acciones a cambio de créditos y 10 de los mayores bancos del mundo acordaron crear un fondo de emergencia de 70.000 millones de dólares, del cual cualquiera de ellos puede pedir hasta un tercio.
Las acciones estadounidenses tuvieron uno de los días más turbulentos en la historia de Wall Street. Los índices Dow Jones y Standard & Poor’s 500 cayeron más de un 4,4 por ciento; mientras que el Nasdaq retrocedió un 3,6 por ciento.










