

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó la implementación de un ambicioso plan militar que podría marcar un antes y un después en la defensa global.
Este martes 20 de mayo, desde la Oficina Oval, el mandatario republicano anunció el desarrollo de un escudo espacial que pretende proteger al país de ataques con misiles de largo alcance.
Bautizado como "Domo de Oro", el proyecto costará $175 mil millones de dólares y tomará como modelo el sistema de defensa israelí. Según Trump, esta iniciativa estará plenamente operativa antes de que finalice su mandato en 2029, aunque fuentes del gobierno reconocen que podría demorar más tiempo.

Cómo será el escudo espacial de 175 mil millones de dólares que anunció el presidente Trump
El Domo de oro será la primera incursión formal de Estados Unidos en la militarización del espacio con fines defensivos. La propuesta contempla una red de armas y sensores orbitales diseñados para interceptar misiles antes de que ingresen al territorio norteamericano.
Trump también anunció que el general Michael Guetlein, actual subjefe de operaciones espaciales, será el encargado de supervisar el desarrollo del programa a lo largo de todas sus etapas.
Por su parte, el Congreso ya recibió una solicitud de 25 mil millones de dólares como partida inicial, mientras que la Oficina de Presupuesto estimó que los componentes espaciales podrían alcanzar un costo total de 542 mil millones en los próximos 20 años.

El modelo israelí que inspira el nuevo sistema de defensa estadounidense
El plan de Trump toma como referencia el sistema "multicapa" de defensa de Israel, desarrollado con apoyo estadounidense. Este sistema ha sido clave para proteger a la población civil y objetivos militares ante constantes ataques desde Gaza, Líbano, Yemen e Irán.
Las cuatro capas del escudo israelí
Iron Dome:
Diseñado para interceptar cohetes de corto alcance. Su activación es selectiva y prioriza blancos poblados. Tiene un 90% de efectividad.
David's Sling:
Defiende ante misiles de mediano alcance, como los utilizados por Hezbollah. Fue desplegado múltiples veces en conflictos recientes.
Arrow:
Opera fuera de la atmósfera y se emplea contra misiles balísticos de largo alcance. Ha sido usado en ataques desde Yemen e Irán.
Iron Beam (en desarrollo):
Basado en tecnología láser, busca ofrecer una defensa de bajo costo. Aún no está operativo, pero su costo por intercepción sería de apenas unos dólares.
Este sofisticado proyecto de defensa, según expertos, podría incorporar elementos de estos sistemas y llevarlos a una escala superior en el espacio. De concretarse, sería el mayor avance en defensa antimisiles desde la Guerra Fría.











