

El cierre del gobierno federal de Estados Unidos mantiene en vilo a millones de ciudadanos. La medida, producto de un nuevo enfrentamiento presupuestario en Washington, no solo afectó a distintas agencias federales, sino que también golpeó de lleno a la Administración del Seguro Social (SSA), que opera con personal reducido tras el despido masivo ordenado por Donald Trump.
A pesar de la crisis, la SSA confirmó que lospagos del Seguro Socialy del Ingreso de Seguridad Suplementario (SSI) seguirán depositándose con normalidad. Sin embargo, quienes necesiten hacer trámites presenciales deberán enfrentar retrasos y restricciones que complican el día a día de jubilados y beneficiarios.
Qué servicios están suspendidos durante el cierre del gobierno
La agencia advirtió que varias funciones quedaron fuera de servicio hasta que se restablezca el presupuesto. Entre los trámites que no pueden realizarse actualmente, se encuentran:
Reemplazo de la tarjeta de Medicare.
Emisión de cartas para comprobar ingresos.
Corrección o actualización del historial de ganancias de los beneficiarios.

Aunque las oficinas del Seguro Social permanecen abiertas, lo hacen con una dotación mínima. Las audiencias judiciales, por su parte, continúan realizándose, pero con un ritmo más lento del habitual.
Seguro Social: qué servicios de la SSA siguen funcionando
Para reducir el impacto sobre los usuarios, la SSA recordó que sus plataformas digitales continúan operando con normalidad. A través del portal en línea, los beneficiarios pueden acceder a la mayoría de los servicios esenciales sin necesidad de acudir a una oficina.
Entre los trámites que sí siguen disponibles figuran:
Solicitud o gestión de beneficios del Seguro Social.
Presentación de apelaciones.
Actualización de datos personales o bancarios.
Reemplazo de pagos perdidos o faltantes.
Emisión de tarjetas nuevas o de reemplazo del Seguro Social.
Registro de reportes de fallecimiento y modificaciones en la información de vivienda o ingresos para beneficiarios del SSI.
COLA 2026: en pausa por el conflicto presupuestario
Uno de los mayores impactos del cierre gubernamental se refleja en la postergación del anuncio del COLA 2026, el ajuste anual del costo de vida que millones de jubilados esperan conocer cada octubre.
La cifra depende del Índice de Precios al Consumidor para Asalariados Urbanos y Trabajadores de Oficina (CPI-W), publicado por la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS). Sin embargo, el cese de actividades forzó a la BLS a retrasar la publicación de los datos hasta el 24 de octubre, una semana más tarde de lo habitual.
Solo cuando esos valores se hagan públicos, la Administración del Seguro Social podrá anunciar oficialmente de cuánto será el aumento del COLA, que busca proteger los ingresos de los beneficiarios frente a la inflación.















