

En julio, la industria automotriz tuvo 18.225 exportaciones, un 19,9% menos que en junio y una caída del 35,7% contra los volúmenes registrados un año antes, informó la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa).
Tras este número, las exportaciones, que habían crecido sólo 2,2% en el primer semestre -contra un salto del 15,5% en producción y del 84,6% en las ventas domésticas-, pasaron a zona negativa en el acumulado de siete meses: un retroceso interanual del 4,7%, a 147.879 unidades.
Hasta ahora, los ejecutivos del sector habían explicado esa menor performance externa por problemas logísticos que hubo entre fines de marzo e inicios de abril, que afectaron los despachos a Brasil, principal comprador de los vehículos hechos en la Argentina, con una participación del 65,2% del total exportado.
Sin embargo, en los números de julio, otras fueron las razones. Aunque no abiertamente, en Adefa sugirieron la pérdida de competitividad de los vehículos nacionales, en especial, por su carga tributaria. Sería la explicación de la caída que los números muestran en los principales mercados de los autos fabricados en el país. En siete meses, se exportaron 96.479 vehículos a Brasil, 11.065 menos que un año antes; 1124 a México, una baja de 1104 unidades; 1549 a Uruguay (merma de 569) y 6570 a Colombia (567 envíos menos).
"Dada la dinámica propia de nuestro sector y el comportamiento reciente de las exportaciones, es clave que sigamos enfocados en una agenda de trabajo conjunta, que apunta a mejorar la competitividad y recuperar presencia en los mercados", expresó Martín Zuppi, presidente de Adefa. "Debemos estar atentos al crecimiento que muestran los destinos de la región y a la creciente competencia", agregó el ejecutivo, piloto local de Stellantis.
Para ello, indicó, "al trabajo que se viene realizando a nivel nacional, es fundamental sumar el compromiso de provincias y municipios en la reducción de la carga impositiva, como herramienta clave para potenciar la competitividad".
El año pasado, la industria automotriz produjo 506.571 vehículos de pasajeros y utilitarios, una caída del 17,1% desde las 610.715 unidades de 2023, que había había sido el nivel más alto en nueve años. A junio, había registrado su mejor semestre desde 2016, con un volumen de 250.478 vehículos.
En julio, la producción fue de 37.112 unidades, un 13,4% menos que el mes previo, debido a las paradas técnicas de mantenimiento que hizo la mayoría de las terminales. Aun así, la cifra fue 16,5% superior a la de julio de 2024, lo que permitió acumular un crecimiento del 10,1% desde enero, a 287.590 unidades.
En tanto, también se registró una desaceleración en las ventas mayoristas. El mes pasado, las terminales les vendieron a sus concesionarios 50.186 0km, una caída del 16,1% contra junio y una suba del 51,9% en comparación con julio del año pasado. El crecimiento interanual había sido del 85% el mes previo. Eso hizo que el incremento en lo que va del año se haya recortado al 79%, a 349.187 ventas mayoristas.
"En estos primeros siete meses, el sector acumula un crecimiento interanual positivo del 10,1% en materia productiva. La contracción en la actividad de julio en producción y exportaciones en el mismo mes se debió a ajustes estacionales producto del receso de vacaciones y tareas de mantenimiento y actualización tecnológica por nuevas inversiones en las plantas de algunas asociadas", señaló Zuppi.













