Desarrolladores apuestan a los créditos propios y planes de ahorro para vender más

En medio del fuerte parate que registra desde hace tiempo el mercado inmobiliario, algunos desarrolladores y grupos financieros salen a probar suerte con alternativas que, al menos así como están planteadas, los bancos no ofrecen.
Créditos a 10 años y en pesos, o planes de ahorro exclusivos para el segmento inmobiliario son algunas de las variables que aparecen en el mercado, con el claro objetivo de impulsar las ventas.
Una de las firmas que apunta en este sentido es Hara del Sol, una urbanización que se levanta en la localidad de Pilar. La empresa ofrece la posibilidad de pagar la inversión a lo largo de una década, con el incentivo extra de que el monto a devolver será en pesos.
"En estos momentos estamos obligados a encontrar variantes que nos permitan impulsar las ventas porque el mercado está realmente deprimido. La parálisis se nota y debemos trabajar sobre eso", dijo a El Cronista Carlos Oddino, director de Haras del Sol.
En la propuesta de la firma aparecen tres variables. Se pueden comprar lotes, casas construidas o casas a construir, con un anticipo de entre el 15% y el 25% dependiendo del modelo elegido, y en hasta 120 cuotas que serán indexadas por el índice de la Cámara Argentina de la Construcción (CAC), que este año ronda el 28% anual.
En cuanto a los valores que se manejan, por ejemplo, en el caso de una casa de 160 metros cuadrados a construir, en conjunto con el lote, de u$s 180,000 (u$s 140.000 corresponden a la vivienda y
u$s 40.000 a la tierra. Aquí se abonará un anticipo del 25% al contado, mientras que el resto en hasta 120 cuotas y en pesos.
La otra propuesta corre por cuenta del grupo brasileño Rodobens, que llegó a la Argentina hace cuatro años para ofrecer planes de ahorro para la compra de automóviles, y ahora hará lo mismo en el segmento inmobiliario.
La compañía ideó un programa mediante el cual crea un fondo integrado por 192 inversores, y que entrega $ 500.000 que pueden ser utilizados para la compra de un inmueble. En este caso el plan de financiación es de 96 meses, y el dinero también se reintegra en pesos.
Mario Gómez, director de la inmobiliaria Lebleu, tiene a su cargo la conformación de estos grupos y destaca la importancia de llevar adelante planes de este tipo. "Es una forma de intentar reactivar el mercado", afirma.
El proceso que se implementará es idéntico al de los vehículos. Por mes, un inversor se llevará el dinero por sorteo, y otro por licitación. En ambos casos, los adjudicatarios del medio millón de pesos deberán a cambio aportar al fondo una garantía hipotecaria para respaldar el dinero, y como compromiso de que continuará pagando las cuotas.
En cuanto a las condiciones para ingresar a este plan de ahorro, hay ventajas respecto de los créditos hipotecarios. Por grupo familiar se requiere un ingreso bruto de $ 25.000, posibilidad que también queda abierta a los monotributistas.
La actualización de las cuotas también estará regida por el índice CAC, aunque esto también correrá para el monto a percibir, por lo que los $ 500.000 iniciales se irán incrementando de acuerdo con esa variable.
La baja en el mercado inmobiliario se hace sentir. Según el Colegio de Escribanos de Buenos Aires, en julio pasado se escrituró un 0,2% respecto de igual mes de 2013, y cayó 1,3% medido contra junio de este año.