En esta noticia

La oración a la Divina Misericordia es una práctica popular entre quienes buscan consuelo, perdón y fuerza en momentos difíciles.

Inspirada en las revelaciones de Santa Faustina Kowalska, esta oración ofrece una manera de conectar profundamente con la misericordia divina. A través de esta devoción, se pide protección y se renueva la esperanza en el amor incondicional de Dios.

La importancia de la Divina Misericordia

La Divina Misericordia es vista como una expresión del amor ilimitado de Dios hacia la humanidad. Los creyentes recurren a esta devoción para pedir perdón por sus pecados y por la paz en sus corazones.

Es una oración que llama a la reconciliación y el alivio espiritual, confiando en la promesa de misericordia para quienes se acercan con fe.

Cómo rezar la oración a la Divina Misericordia

La oración se realiza tradicionalmente a las tres de la tarde, conocida como la Hora de la Misericordia, aunque puede rezarse en cualquier momento.

La Coronilla de la Divina Misericordia es una de las formas más comunes para pedir la misericordia divina; se utiliza un rosario, en el que se repite la frase "Por su dolorosa Pasión, ten misericordia de nosotros y del mundo entero", intercalando con peticiones especiales.

Pasos para rezar la Coronilla de la Divina Misericordia:

  1. Inicio: rezar un Padre Nuestro, un Ave María y el Credo.
  2. Las decenas: en cada decena, se reza "Por su dolorosa Pasión, ten misericordia de nosotros y del mundo entero".
  3. Finalización: repetir tres veces "Santo Dios, Santo Fuerte, Santo Inmortal, ten piedad de nosotros y del mundo entero".

Qué se le pide a la Divina Misericordia

A través de esta devoción, los fieles suelen pedir por la paz en el mundo, el bienestar de la familia, la sanación personal y la fortaleza espiritual.

También es común orar por el perdón, el alivio en tiempos de angustia y la intercesión en momentos de necesidad urgente.

La confianza en esta oración reside en la creencia de que Dios escucha con compasión y otorga consuelo.